Al acabar un cuadro, disfruto llenando ese espacio vacío con lo que necesita cada persona. Llamo a mi Arte Sunao ( palabra japonesa ) porque , ante cada encargo que aparece , me inclino humildemente para conseguir plasmar el deseo de esa persona e intento adoptar una actitud de apertura y aceptación ante los regalos que me organiza Dios.
Muchas veces tenemos las paredes de casa “desnudas” en espera de algo que realmente nos guste, nos impacte, nos calme, nos divierta o no nos cansemos de ver…
Si te gusta el Arte NAÏF, el Arte Sano y Mágico, si disfrutas con lo que has visto aquí , no dudes en ponerte en contacto conmigo.
¡¡ME ENCANTARÁ AYUDARTE!!